Deja de pensar tanto, deja de luchar.
En que piensas tanto y contra que luchas.
No todo es tan complicado, es muy simple,
no lleves una carga innecesaria,
Mira en derredor y verás la simpleza,
de un mundo que brinda paz y comprensión.
Debes comenzar en ti, luego en los demás,
observa detenidamente, una salida de sol,
una puestas de sol, el paso de la luna,
el brillar de las estrellas, el bramar del océano
la mansedumbre de un lago, la tempestad
de una tormenta, desde principio a fin.
Escucha al viento, y al sonar de las campanas
que el vienen de los confines del universo.
En algún momento un rayo de luz, y a lo mejor
solamente una vez, te va a iluminar, para poder
ver en ti la esperanza, que a de señalar tu camino.