Como ver los pensamientos en
forma real, tratarlo como hecho mental. Consiste en el piloto automático, o en
e modo “hacer”, la mente utiliza su propia creaciones, sus pensamientos y sus
imágenes como materia prima. Son su moneda de cambio y adquieren Valor propio.
Puedes empezar a confundirlas con la realidad a la mayoría de las circunstancias,
eso tiene sentido. Si tienes pensado visitar un amigo, es preciso que tengas en
mente el destino. La mente planificadora, la que así piensa, te llevará hasta
allí. No tiene sentido dudar de la veracidad de tus pensamientos: “Realmente
voy a visitar a mi amigo?”. En tales situaciones que resulta útil tomar como
cierto los pensamientos. Sin embargo, eso se convierte en un problema cuando te
sientes estresado. Es posible que empieces a decir de Tí mismo: “Me voy a
volver loco si esto sigue así; debería encontrar una manera mejor de hacer las
cosas”. Puedes tomar por cierto esos pensamientos. Tu estado de ánimo cae en
picada cuando tu mente reaccionar de manera muy dura: “soy débil; soy un
desastre”. Luchas más y más, ignorando los mensajes de tu cuerpo castigado y
los consejos de tus amigos. Tú pensamientos han dejado de servirte y se han
convertido en tus amos, muy duros e implacables. En el entrenamiento de la
mente plena, lo que enseña es que los pensamientos son sólo los pensamientos,
solo son hechos que existen en la mente. En muchos casos resultan valiosos,
pero no son “Tu” o la “Realidad”. Son tus comentarios continuos sobre ti mismo
y el mundo. Y reconocerlo te libera de la realidad dislocada que todos nosotros
construimos durante preocupaciones interminables, dando vuelta a las cosas,
pensando sin parar. Recuperas la capacidad de ver un camino claro en la vida.
En el modo hacer, siempre
resuelve los problemas teniendo en mente los objetivos y los destinos, pero
también los anti objetivos, y los lugares a lo que no quieres ir. Es el caso,
por ejemplo, cuando conduce es desde A hasta B porque resulta útil saber que
partes de la ciudad por las calles conviene evitar. Sin embargo, se convierte
en un problema si utilizas la misma estrategia para los estados mentales que
intentas evitar a toda costa. Por ejemplo, se intenta resolver el problema del
cansancio y el stress, también tendrás en mente los lugares que no quiere
visitar, como el agotamiento, el sentimiento estar quemado y la depresión. Así
además de sentirte cansado y estresado, empiezas a crear nuevos temores, lo que
incrementa Tu ansiedad y Tú estrés y con ello el agotamiento. A pesar de todos
los esfuerzos, el modo a Ser utilizado en el contexto equivocado, te lleva paso
a paso hacia el desgaste y el agotamiento.
Si hacemos un viaje mental en el
tiempo Versus permanecer en el momento presente, tanto tu memoria como tu
capacidad de hacer planes para el futuro, son fundamentales para el buen
funcionamiento de tu vida Cotidiana, pero también reciben la influencia de tus
estado de ánimo dominantes . Cuando te sientes estresado, tiendes a recordar
únicamente Las cosas negativas y te cuesta rememorar las positivas. Algo
similar ocurre cuando piensas en el futuro: El estrés te lleva a pensar que un
desastre te espera a la vuelta del esquina, y cuando te sientes infeliz, o se va apoderando de ti un sentimiento de
desesperación, resulta casi imposible mirar al futuro con optimismo. Cuando
estos sentimientos se apoderan de tu mente consciente, dejas de tener en cuenta
Que sólo son recuerdos del pasado o
planes para el futuro y te pierdes en un viaje mental en el tiempo.
Revivimos hechos pasados y
volvemos a sentir su dolor; previvimos desastres futuros y presentimos su
impacto.
La meditación entrena a la mente
para ver conscientemente los pensamientos a medida que surgen. Esto le permite
vivir su vida a medida que se va desarrollando en el momento presente. No
significa que este prisionero del presente. Puedes seguir recordando el pasado
y planificar el futuro, el modo Ser te permite verlos tal como son. Ves lo
recuerdos como recuerdos y los planes como planes. Tener conciencia de que
estas recordando o planificando te ayuda a dejar de ser un esclavo de los
viajes mentales en el tiempo. Evitas las el dolor añadido que provoca revivir
el pasado y previvir el futuro.
Debemos tener cuidado, que el
modo de piloto automático o el modo hacer, nos puede dejar presos, de
situaciones en las cuales las tomamos como importantes, quedando atrapados en
esos objetivos, deportivos, laborales, familiares. Estos objetivos merecen la
pena en sí mismos, pero por su naturaleza exigente resulta tentador
concentrarse en ellos y excluir todo lo demás, incluyendo tu propia salud y tu
bienestar. Al principio es posible que te digas a ti mismo que tanto ajetreo es
temporal y que estas dispuesto a practicar actividades que alimenten tu alma.
Sin embargo, renunciar a esas cosas puede provocar la desaparición progresiva
de tus recursos internos. Al final acabarías exhausto, apático, y desgastado.
Si caminas por el modo Ser se
restaura el equilibrio ayudando a sentir con más claridad las cosas que te
quitan energía y las que te despojan de estos recursos internos. Te ayuda a
sentir la necesidad de alimentar tu alma y te brinda el espacio y el valor necesario para hacerlo. Además, ayuda a
enfrentarte mejor a sus aspectos inevitables de la vida, que pueden llevarse tu
energía y tu felicidad innata.
No es necesario que compares tu
vida (o tu nivel de vida), con una vida ficticia en el futuro, o una visión
poco edulcorada del pasado. No necesitas permanecer despierto por la noche
intentando juzgar el impacto que podría ejercer en el futuro laboral o
deportivo, un comentario sin importancia que has hecho en una reunión o
competencia. Tampoco necesitas preocuparte un comentario hecho como de pasada
por un amigo. Si simplemente aceptas la vida tal como es, te sentirás mucho más satisfecho y cada vez
más libre de preocupaciones:
Y si es preciso emprender alguna acción, la decisión más sabía surgirá de
tu mente, justo cuando no estés dándole vuelta.