Es muy largo el proceso de formarnos, se nos concibe, a veces por amor, a veces por casualidad, pero se nos concibe. En ese momento las células comienzan su trabajo de formar una nueva vida, nosotros. Ese es el diamante en bruto que comienza a trabajar la naturaleza, para que seamos lo que somos, pero también si no hacemos lo nuestro por parte de los padres y después por nosotros y en conjunto con nuestras sociedades, esa vida cuando salga a la luz puede tener problemas. Después la vida sigue trabajando, en cuerpo y mente, formación intelectual, formación física, formación moral, van haciendo de nosotros en conjunto con la sociedad que nos toca vivir, al hombre y mujer que seremos algún día.
Ese Diamante en formación, que se va tallando, puede tener defectos o salir perfecto, a veces corregible, a veces ya no. En general, tiene arreglos y siempre estamos a tiempo de correcciones, aunque eso signifique perder una parte en el pulido de reparación, pero si lo podemos hacer, que importa perder un poco de peso, un poco de valor, si en definitiva el valor agregado del pulido de arreglo, nos va a hacer un diamante mejor.
Debemos comprender que si bien el Diamante es mineral mas duro, convengamos que de los seres vivientes nosotros también, pero solo en mente y espíritu, no en cuerpo, el cual es muy frágil, tanto que cualquier y tonto golpe o accidente pueden ocasionar la muerte. Por ello es que si somos fuertes, debemos serlo en el conjunto de lo que significa ser un diamante humano. Esa comprensión dura toda la vida, y a veces la dejamos si haber completado todos los facetados. A veces porque no se pudo, no supimos, no nos dejaron. De cualquier manera en cualquier estado que se encuentre es valioso, tanto, que cada uno es único e irrepetible. Porque no seguir trabajándolo, así lleve toda la vida, hasta llegar al momento del pulido, ese momento inmaculado del trabajo final, ese momento que a lo mejor puede hacerse hasta en el último aliento de vida, ese momento, es en el que sabremos si algo pudimos hacer bien.
Esa es la Cuestión (Hamlet, de Shakespeare ), en el uso vulgar de esta frase, tendremos la determinación, la fuerza, y a voluntad de Ser. LO QUE DEBEMOS SER. HUMANOS DE VERDAD
Hola Ruben,muy buena tu reflexión
ResponderEliminarA veces olvidamos que donde más energías debemos poner es en lograr ser HUMANOS DE VERDAD, DIAMANTES HUMANOS
Un abrazo. Te sigo
Hola soy Nati, estaba paseando por los blog y me he encontrado con el tuyo, me ha gustado mucho como trabajas y lo que tienes publicado me parece muy interesante, te felicito por ello.
ResponderEliminarYo tambien tengo un blog el mio es de cuentos, pasaté cuando te apetezca sin compromiso, espero sea de tu agrado.
Yo volveré a visitarte y ha seguirte, hasta entonces un saludo muy cordial Nati.